"Amo las canciones que me hicieron conocida, pero quiero ir más allá"
La cantante visitará nuestra ciudad la próxima semana con su espectáculo "Canciones a la carta"
Luego de doce discos editados, Soledad Pastorutti logró darse un gusto personal y acaba de realizar un ciclo de conciertos íntimos en Buenos Aires en los que el público elige sus temas preferidos. "Cada show es único y lo que vivís nunca más se repite", explicó.
La popular
artista desembarcó la semana pasada en el porteño Teatro ND Ateneo con
su recital "Canciones a la carta", en el que los espectadores pueden
elegir qué temas escuchar mediante su voto y con el que se presentará el
próximo 25 de noviembre en el Coliseo Podestá de nuestra ciudad.
¿Cómo surgió la idea de estos shows "a la carta"?
"Yo los veo como una suerte de alternativa de los conciertos que doy normalmente y que sigo dando en los aniversarios de los pueblos, en las fechas patrias. Como soy una artista local y popular, necesitaba una vuelta de tuerca para que el público tenga ganas de verme en un teatro y no en un festival. Quería un concepto novedoso".
Y para hacerlo eligió una sala pequeña, más bien íntima, en Buenos Aires, lejos de escenarios como el Gran Rex o el Opera.
¡Es que ésa era la idea! La excusa del espectáculo es presentar mi último disco, "Vivo en Arequito", pero con la particularidad de que es un show 'a la carta'. En la puerta del teatro te dan, como si fuese un restaurante, un menú, con entrada, plato principal y postre. Las opciones fueron votadas por Internet y se incluyen las 30 canciones más elegidas. Allí tildás qué tema te gusta más de los seleccionados y se hace la elección en el momento. Yo hasta que no se hace el recuento no sé qué canciones se van a tocar cada noche. Entre todos los presentes, además, sorteamos gente para que suba al escenario y me escuche desde una suerte de living que armamos. Es un living con mate, con cosas para comer. algo íntimo y diferente".
Cuando se abrió el juego a que la gente elija el repertorio, ¿tenía corazonadas de qué composiciones podían ser favoritas?
"Te voy a ser sincera: había temas que yo hoy por hoy no puedo dejar de cantar, clásicos que sí o sí iban a estar y esas canciones no las incluí porque iban "de cajón". Y aparecieron canciones que hace mucho que no tocamos. Amo las canciones que me hicieron conocida, pero quiero ir más allá. Tengo doce discos y mil temas para cantar, y no me sorprendieron las canciones folclóricas. Pero en la parte 'del postre', en donde están las baladas, me impresionó que aparecieron muchos duetos que no grabé en mis discos y que la gente quería escuchar. Por ejemplo, la canción que canto con Franco de Vita la canto siempre".
¿Y sintió emoción al volver a ensayar viejas canciones?
"Fue hermoso lo que sucedió, porque ensayamos con toda la banda nuevas variantes, nos sacamos de encima algunos vicios de haber tocado siempre lo mismo. Fue una verdadera bocanada de aire fresco".
Fuente: ElDia
¿Cómo surgió la idea de estos shows "a la carta"?
"Yo los veo como una suerte de alternativa de los conciertos que doy normalmente y que sigo dando en los aniversarios de los pueblos, en las fechas patrias. Como soy una artista local y popular, necesitaba una vuelta de tuerca para que el público tenga ganas de verme en un teatro y no en un festival. Quería un concepto novedoso".
Y para hacerlo eligió una sala pequeña, más bien íntima, en Buenos Aires, lejos de escenarios como el Gran Rex o el Opera.
¡Es que ésa era la idea! La excusa del espectáculo es presentar mi último disco, "Vivo en Arequito", pero con la particularidad de que es un show 'a la carta'. En la puerta del teatro te dan, como si fuese un restaurante, un menú, con entrada, plato principal y postre. Las opciones fueron votadas por Internet y se incluyen las 30 canciones más elegidas. Allí tildás qué tema te gusta más de los seleccionados y se hace la elección en el momento. Yo hasta que no se hace el recuento no sé qué canciones se van a tocar cada noche. Entre todos los presentes, además, sorteamos gente para que suba al escenario y me escuche desde una suerte de living que armamos. Es un living con mate, con cosas para comer. algo íntimo y diferente".
Cuando se abrió el juego a que la gente elija el repertorio, ¿tenía corazonadas de qué composiciones podían ser favoritas?
"Te voy a ser sincera: había temas que yo hoy por hoy no puedo dejar de cantar, clásicos que sí o sí iban a estar y esas canciones no las incluí porque iban "de cajón". Y aparecieron canciones que hace mucho que no tocamos. Amo las canciones que me hicieron conocida, pero quiero ir más allá. Tengo doce discos y mil temas para cantar, y no me sorprendieron las canciones folclóricas. Pero en la parte 'del postre', en donde están las baladas, me impresionó que aparecieron muchos duetos que no grabé en mis discos y que la gente quería escuchar. Por ejemplo, la canción que canto con Franco de Vita la canto siempre".
¿Y sintió emoción al volver a ensayar viejas canciones?
"Fue hermoso lo que sucedió, porque ensayamos con toda la banda nuevas variantes, nos sacamos de encima algunos vicios de haber tocado siempre lo mismo. Fue una verdadera bocanada de aire fresco".
Fuente: ElDia
